Es costumbre celebrar en nuestra tierra el día de los Calbotes en la fiesta de Todos los Santos. Por eso nosotros lo hemos querido festejar también con nuestros alumnos. Los niños observaron, cómo expertos castañeros/as daban aire a las brasas y volteaban las castañas para que poco a poco quedaran bien asadas.
Las comimos en el aula porque la lluvia no nos permitió hacerlo en el patio como en otras ocasiones. Y como postre disfrutaron con la lectura y dramatización de un cuento elegido para la ocasión, e interpretado por dos de las madres colaboradoras en la actividad.